Como un eco que vibra en el viento
y que asciende hasta el trono de Dios,
entonemos el himno que canta
de la Escuela la excelsa labor (bis)
Cantemos alegre con fe y entusiasmo
que está en la cultura nuestra redención;
y amemos la Escuela donde se acrisolan
ciencias, letras y artes con la religión.
Y en pos de una dicha futura
que la senda del bien nos señala,
firmes en nuestros propósitos ensalcemos
a las Escuelas Parroquiales.
En las notas de un himno solemne
dando el tono de nuestro fervor,
nuestras voces unidas alaben
de la Escuela la excelsa labor (bis).
Y al ritmo sonoro de nuestros afanes
la oscura ignorancia que nos cegó ayer
se encienda la llama de luz cegadora
que da la cultura, la fe y el saber.